Bien es verdad que a mi lo de los móviles no me llamaba la atención. Y digo llamaba porque no me llamaba la atención hasta hace un rato. Me llamó el marido de mi hermana preguntando si quería un teléfono que le habían regalado y he dicho que sí.
El teléfono es:
Y he de confesar que me hace muuuuuuuucha ilusión.
¡Qué pequeñez de caja!
4 comentarios:
Que lo disfrutes con salud.
Yo me compré un IPod- que todavía no he recibido- y estoy hecho un niño antes de Reyes. A mí me ENCANTAN los juguetes electrónicos y me pone de pésimo humor cuando no funcionen como deben.
Ya quisiera yo tener maridos de hermanas que me regalasen ifones.
Que lo disfrutes.
Desde el aparato en cuestión puedo decir que es una maravilla.
Ojo con las aplicaciones para iPhone... ¡se convierten en una adicción! :-)
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