martes, 13 de enero de 2009

Para mí es domingo

Recuerdo esos domingos por la noche cuando era pequeño en los que estaba con ese "síndrome de domingo durante el curso" en el que ya estaba pensando que al día siguiente había que madrugar para ir al cole.

Mañana vuelvo al trabajo, así que estoy con el mismo síndrome. Habría muchas maneras de tratar de olvidarlo o conjurarlo, pero con el frío que hace... no lo consigo.

Además hay ciertas cosas que no ayudan: hoy he visto en mi edificio la larga mano de la crisis, la especulación y los bancos y cajas. Uno de mis vecinos (es colombiano) ha llegado un momento en que no ha podido pagar la hipoteca por el piso. Se había endedudado en 200.000 € por un piso que no lo vale ni de coña. Hoy entregaba el piso a Cajamadrid y como presidente de la comunidad le tengo que hacer un certificado de que no debe cuotas. Una víctima de los engaños de la especulación y los créditos fáciles de los bancos.

Una manera de evadirse podría ser la música: ayer descubrí algo que desconocía (mi cultura musical es limitadísima). El 22 de diciembre de 1808 se estrenó una obra MARAVILLOSA: la Pastoral de Beethoven.

Pero no se estrenó solamente esa obra. Esa noche en el Theater an der Wien (Viena) se dedicó el concierto (unas cuatro horas con descansos, ya que entre obra y obra la gente se iba a calentar bebiendo ponche ya que estaban en lo más frío del invierno) de manera íntegra a estrenos de Beethoven.



La Pastoral, la 5ª sinfonía, parte de la Misa en Do mayor, el concierto para piano nº 4 y la Fantasía Coral (Op. 80), todas dirigidas y, en algún caso, interpretadas al piano por el propio Beethoven.

Creo que es de justicia recordar que el día que aquí hemos celebrado la lotería de Navidad, hacía 200 años que se habían estrenado parte de las obras más destacadas de la historia de la música. Me tiemblan las piernas al pensar en escuchar el estreno de esas obras juntas.

Otra de las cosas que nos quedan es esperar el verano. ¿Dónde iremos de vacaciones? M. quería ir a China o Tailandia o algún lugar de Oriente. Yo quería ir a los EE.UU. y no tengo ninguna curiosidad en ir a Vietnam, pero creo que es momento de ahorrar y podemos buscar un destino más cercano. Curiosamnete llevamos dos días en que yo insisto más en ir a Oriente y M. insiste más en los EE.UU. Eso sí, sigo sin tener la más mínima curiosidad por ir a Vietnam.

Hombre, en estos días ¡qué decir! Pues que no estaría mal ir a tostarse un poco a algún lugar con playa.




Seguro que más de uno no dudaría en ir a la playa donde van los jardineros.

2 comentarios:

Gesualdo dijo...

Pues fatal, no hay nada más deprimente que un domingo por la tarde, pero bueno al menos empiezas la semana por la mitad, asi que en dos dias ya es viernes que es más alegre.

RMN dijo...

Ánimo la vuelta y sigue apostando por los EEUU, a mi oriente tampoco me dice nada :)