Fuimos a la TAPO, la estación camionera (de autobuses) en taxi y tomamos un camión (autobús) que nos llevó en un par de horas a Puebla. El caos de México D.F. es la causa de que la mayor parte del tiempo de viaje sea para salir de la ciudad. Al llegar a Puebla tomamo otro taxi que nos llevó a la Catedral. Es muy chocante ver cómo las naves industriales llegan prácticamente hasta el mismo centro de la ciudad, provocando un contraste enorme entre una calle con talleres y una hermosa calle colonial.
Dicen que es la ciudad de México con mayor número de iglesias, y no voy a ser yo quien lo niegue. En esta foto del lateral de la catedral se puede ver a cuatro reyes españoles y los ángeles que adornan la verja.
En el Zócalo estaba esta maravillosa calle cubierta que nos trasladaba a Bruselas.
Y junto a esta calle, el Palacio Municipal.
Empezamos a dar vueltas por Puebla viendo iglesias, un mercado tipo Eiffel,
calles preciosas y terminamos junto a esta misma plaza del Zócalo comiendo el famoso "mole poblano", que es una salsa que está hecha con cacao (con muyyy poco dulce) que se utiliza con algunas carnes.
Antes llegamos a visitar el Templo de San Francisco
Como anécdota curiosa enfrente había un "parking" al aire libre con un vigilante de unos 900 años, todo encorvadito, pero con UN PISTOLÓN que abultaba más que él.
Después de comer seguimos viendo lugares bonitos y pensamos ir a Cholula, que es un pueblo que está a unos 20 minutos en coche de Puebla y desde donde se ve el Volcán Popocatépetl (lo he escrito bien a la primera, que conste) y donde está la mayor pirámide de mesoamérica. Llamamos a un taxi por teléfono (el taxista que nos llevó en la mañana nos dio una tarjeta de su compañía de taxis) y quedamos en la esquina de dos calles. Mientras esperábamos M. se metió en la iglesia que estaba en la esquina y vio al "Niño cieguito". Él hizo fotos, yo no me atreví.
Dicen que en Cholula había tantas iglesias como días, pero no es verdad. Parece ser que contaban los pequeños altares como iglesias.
Allí hay una pirámide que es la más grande de mesoamérica y dicen que la más voluminosa del mundo. Tan grande, que creyeron que era una montaña, ya que está cubierta en parte por vegetación. Encima tenía un templo prehispánico y los españoles lo derribaron para erigir allí la Iglesia de Nuestra Señora de los Remedios.
Esta foto es cortesía de http://www.aiesec.org.mx/ porque como estábamos en época de lluvias, las nubes tapaban el volcán.
Llegamos y nos metimos en el interior de la pirámide: un túnel largo y estrecho.
Se sale al otro lado de la pirámide
(Foto cortesía de M.)
donde se puede apreciar cómo era en realidad antes de que estuviera cubierta por la vegetación.
En ese momento empezó a diluviar. Nos metimos en el taxi y decidimos que era hora de volver a México D.F. Era increíble lo que llovía, hubo un momento en que creíamos que el taxi no iba a poder seguir avanzando por las calles.
Como bien dijo Drichal, cogimos un taxi para ver un túnel y que nos cayera el diluvio universal.
Al llegar junto a nuestro hotel buscamos un restaurante donde cenamos unas quesadillas riquísimas y un postre con dulce de cajeta (similar al dulce de leche).
1 comentario:
Sigo pensando que las fotos son geniales, me encantó la de la iglesia de San Francisco y la pirámide que no parece pirámide ;)
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