Ya que esta clase política, que los ciudadanos hemos permitido que nos chupen la sangre, no se arriesga nunca y no se pone NUNCA delante de nosotros, pues la gente aprovecha a criticar al poderoso cuando se pone a su alcance. Cómo se ve que el único contacto que tienen con la realidad son los chóferes que pagamos con nuestros impuestos, porque el resto de los que rodean a los poderosos son los lameculerillos.
Y el devastador Ruiz Faraón va y se solidariza con el devastador de la nación. Como decía mi abuela, Dios los cría y ellos se cogen la tosferina. Se ve que empieza a barruntar que en cualquier momento le puede caer lo mismo o una crítica todavía más virulenta por su gestión discutida y discutible, por lo que apoya al padre de Alba y Laura.
Todos calladitos ¿eh?
En una cadena de televisión se ha visto al presidente del gobierno haciéndole guiñitos de complicidad al príncipe de Asturias. Como no se ponga las pilas, cambiamos lo de "Zapatero dimisión" por "Que dimita el Borbón".
Como estas cosas se extienden como la pólvora, el marido de Carla Bruni también protesta porque le critiquen.
Naaaaaada, todos calladitos a pagar impuestos y a decir "sí, bwana".
1 comentario:
Pues sí, a currar y a pagar impuestos que de lo demás ya se encargan ellos. Y lo del hijo de Sarkozy es que no tiene nombre, que no me digan que no hay gente más preparada que un chaval de 23 años.
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