La vida de este fin de semana ha contribuido a ello. El viernes fuimos a cenar a un restaurante griego: Dionisos. Parece que es una cadena de Barcelona que ha abierto su primer restaurante en Madrid. Lo que cenamos fue simplemente exquisito. Compartimos "Pikilia", que consiste en cinco entrantes entre los que estaban deliciosos humus y tsatsiki. Como segundo plato nos pedimos moussaka y un "exohikó de cordero" (hojaldre griego relleno de cordero, verduras y queso). Pedimos un surtido de postres para dos entre los que había un baklava buenísimo (todavía me relamo).
Ayer fuimos al cine con unos amigos. Estuvimos viendo Tintín en versión original. Me pareció muy entretenida. ¡Qué placer escuchar a Jamie Bell en inglés.
Además la banda sonora de John Williams me pareció buenísima. Especialmente los títulos de crédito iniciales, que eran una mezcla de "Atrápame si puedes" y "La vuelta al mundo en ochenta días", es decir, un estilo al genio Saul Bass.
Estos de "Anatomía de un asesinato" (Saul Bass) y "Atrápame si puedes"(Florence Deygas y Olivier Kuntzel) me parecen pequeñas obras maestras que dan comienzo a grandes películas. Supongo que estas obras han inspirado a los que han hecho los títulos de la serie "Mad Men".
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Mañana me voy a Barcelona a pasar un par de días, pero no por vacaciones sino para trabajar (como suele ocurrir todos los años por estas fechas). Encima creo que no voy a poder disfrutar de la compañía de mis amigos barceloneses porque me quedo en el mismo hotel que la superioridad (algún privilegio tiene que tener comerse estos marrones) y es muy posible que tenga que ir con ellos de cena. Lo bueno es que me he librado de una cena de compromiso a la que nunca he asistido, y a la que no me apetece asistir, lo que he conseguido en los cinco años que me podía haber tocado.
Algo bueno del viaje a Barcelona es que me voy a perder el debate Rbcb-Rjy. O veo a los amigos o salgo con la superioridad, pero no hay debate.
Tengo muuchas ganas de que llegue el mes de enero, para que ya estén resueltas todas las dudas y todas las incertidumbres. Tengo compañeros a los que les encanta la "conspiración" y ya hacen quinielas sobre nuestro próximo director. A mi me da muchísima pereza empezar a explicar todo al nuevo jefe, que no tendrá ni p*ta idea de qué va el negocio...
Por cierto, esto de sacar a Felipe y a Alfonso es tan "ochentero". Vamos lo próximo es llevar a los mítines a Locomía.
Hay algo que casi me estremece tanto como que saquen de la tumbona a Felipe y Alfonso, y es la omnipresencia de Ana Mato (a la que no le "constaba" tener un Jaguar en el garage de su casa...). Ella, su actitud y su aspecto... ¡puag! Encima se rumorea que me la pueden poner de ¡jefa suprema! NOOOOOOOOOOOOOOOOOO.
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En el trabajo he conseguido hacer algo que hace unos meses hubiera sido impensable: he rechazado un marrón con publicidad. Un día me envió un subdirector (no el mío) mucha documentación por correo electrónico, a los pocos minutos me llamó un alto funcionario desde Bruselas reclamando mi atención sobre esa documentación porque iba a haber una reunión (no sabía cuándo) y debería ir o hacer un informe para que él fuera a la reunión. Al día siguiente me volvió a llamar el "alto funcionario" para comunicarme que había tenido la primera reunión el día anterior (¡pero si no sabía cuándo la iba a tener 10 minutos antes!) y reclamando mi presencia una semana después en Bruselas o un exhaustivo informe que tendría que elaborar durante el "puente" del 1 de noviembre. Me enfadé porque los marrones venían de "otros departamentos", no del mío y porque me habían mentido: mis colegas de otros países habían tenido un par de meses para hacer el informe que a mi me pedían durante el puente de los Santos. Lo averigüé porque entre la documentación que me enviaron estaban las observaciones de mis colegas de otros países...
Al día siguiente remití un correo a los dos implicados (el subdirector y el "alto funcionario") con copia a mi subdirector y mi jefe inmediato: no hay tiempo suficiente. "¡Anatema, anatema!" exclamaron al unísono el subdirector enmarronador y el "alto funcionario". Al final les dije que haría unas "notas" (no un informe) después del puente. El día que les tenía que enviar las notas les dije que lo haría a última hora de la noche o a primera hora del día siguiente, con lo que hice madrugar al bruselense, que pensaba ir de su casita a la reunión a las 10 de la mañana.
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Lo que está ocurriendo en El Hierro es apasionante desde el punto de vista científico, aunque desde el punto de vista humano es tremendo. Busquemos algo positivo: el volcán ha puesto en el mapa mental de muchos españoles (peninsulares) a la isla de El Hierro, que nunca han sabido muy bien dónde estaba, por aquello de que las Islas Canarias están bastante lejos...
Esta imagen la he sacado de el periódico local. Por cierto, ¿habrá quien reclame las nuevas tierras para sí? ¿Serán urbanizables?
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El lunes pasado utilicé uno de mis días de libre disposición ("mocosos" en el lenguaje habitual) para tener cuatro días seguidos de descanso. Nos fuimos M. y yo de excursión a Sigüenza, donde nos hizo un día magnífico y donde comimos muy bien: migas seguntinas, cabrito asado y arroz con leche.
A la izquierda se ve el doncel, en escorzo.
Como se puede ver en la foto anterior, la estatua del doncel y casi todas las de esa capilla, fueron encargadas por el hermano del doncel, que fue Obispo de Canarias. En resumen, lo pasamos muy bien.
A la vuelta, fuimos a una tienda en Madrid en la que venden cosas de Fred Perry. Al final decidió comprarse una chaqueta en la tienda online por la noche. Le llegó ¡el jueves!
1 comentario:
Joer, lo tuyo y el esquivar marrones es un arte, eh?? ;)
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