Hoy me di cuenta que gracias a este curso he cumplido uno de esos sueños que todos tenemos desde niños: ser bombero por un rato.
Creo que no hay nadie que no haya soñado de pequeño con ir en el camión de bomberos, entrar a saco en un edificio ardiendo y ser el héroe que rescata a la pobre gente atrapada en él.
Por supuesto, la realidad es mucho más sucia y dura. El uniforme pesa un montón, todo huele a humo y la botella de aire comprimido pesa bastante.
Es muy agobiante moverse con todo el equipo y con una máscara con la que apenas se ve y en la que el vaho te empaña lo poco que ves. Es angustioso estar en lugares en los que apenas se ve y dependiendo del aire que te llega a través de la mascarilla.
También es increíble la cantidad de mosquetones, cuerdas, etc que tienen para trepar, bajar o desplazarse con seguridad.
Encontré unas fotos donde se puede ver el equipo que usan los bomberos de Nueva York. Esas fotos me las podrían haber hecho a mi, porque nos pusieron esas cosas, además de la botella de aire comprimido y la máscara.
(Fuente)
(Fuente)
(Fuente)
Ahora que lo pienso bien: ¿solamente es un sueño de niños?
--------------------------------------------------------------------
Nota: no hice un curso de bombero, solamente nos dieron unas nociones de cómo actuar en una situación comprometida y cómo trabajan los bomberos. Nada más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario