lunes, 19 de abril de 2010

Y luego dicen...

... que me sube la tensión.

Esta reunión europea me trae por la calle de la amargura. Hoy me envía un correo electrónico una de las posibles participantes para decirme que la Comisión Europea y la Administración española ha organizado unas jornadas sobre nuestra industria en las mismas fechas. De todos los días del semestre, tuvimos que elegir precisamente las mismas que tienen elegidas para otras jornadas.

Esta tarde mi jefe me dice que él me lo había contado (aseguro que no). Y encima me dice que seguramente tendré que ir a la conferencia en Cataluña y me he tratado de librar de todas las maneras posibles.

Ante mi desesperación hoy marché al centro, que estaba por allí mi madre y me compré un traje, unos zapatos (regalo materno) y la mascarilla facial (fantástica, por cierto, y no me pagan nada).

Esta noche me tomaré una dormidina y a olvidar esto... hasta mañana.

2 comentarios:

starfighter dijo...

Lo de tu jefe es de juzgado. Vamos, que yo me cogía una bajita durante un par de semanas y verás cómo se lo curra un poco más.

Eleuterio dijo...

Apoyo la moción del colega anterior. Los jefes se acostumbran demasiado a los buenos empleados, a lso que se toman el trabajo en serio.

A veces hay que educar al jefe.